Otra víctima más. Otro trabajador que sale de su casa para ganarse la vida, y la pierde. Un hombre joven, que conducía un camión del servicio de limpieza, ha sido aplastado en la prensa del camión esta misma mañana en Paracuellos de Jiloca cuando realizaba la recogida de basuras de esta población. Parece ser que realizaba su trabajo sólo, y es posible que los sistemas de seguridad de la prensa del camión no hayan funcionado correctamente. Este hombre de 36 años, deja esposa y dos hijas pequeñas. Dos niñas, que a partir de hoy, tendrán que crecer sin padre.
Trabajamos para vivir y es injusto trabajar para morir. Personalmente espero y quiero confiar que si hay alguna responsabilidad, si alguien decidió recortar en seguridad y ha propiciado este tipo de accidentes, que se le exijan las responsabilidades correspondientes.
Este trabajador y su familia ya no tienen una segunda oportunidad, pero debemos evitar que se repitan estos accidentes.
En época de crisis ha resultado fácil reducir el trabajo a solamente dos variables cuantitativas: productividad y rentabilidad. Pero el trabajo es algo más y nos va la vida en ello. JAG
